El equipo de Hoosier Energy trabaja con productores avícolas para participar en un estudio de consumo de energía.

La calefacción de los establos avícolas puede ser un gasto enorme para los granjeros, especialmente durante el invierno. Las oportunidades para encontrar formas nuevas y eficientes de disminuir el uso de energía para la calefacción de establos podrían ayudar a disminuir esa carga.

 

En ese esfuerzo, la Liga de Electrificación Beneficiosa (BEL), una organización sin fines de lucro dedicada a promover la electrificación beneficiosa de la economía, junto con la Asociación Nacional de Cooperativas Eléctricas Rurales (NRECA), una organización que representa los intereses legislativos de las cooperativas eléctricas en los EE. UU., han otorgó a Hoosier Energy una subvención de $25,000 para crear un proyecto para investigar el ahorro de propano y gas natural en granjas avícolas. Estas granjas utilizan sistemas de recuperación de calor residual y tecnologías eléctricas que incluyen intercambiadores de calor, controles automáticos, registro de datos y monitoreo digital, junto con variadores de frecuencia a diferencia de las tecnologías actuales de calefacción de establos que no utilizan recuperación de calor residual.

 

Una vez confirmados, estos ahorros podrían proporcionar a las empresas de servicios públicos nuevas formas de promover la electrificación beneficiosa (BE) en áreas rurales desatendidas. Electrificación beneficiosa es un término para reemplazar el uso directo de combustibles fósiles (p. ej., propano, aceite de calefacción, gasolina) con electricidad en formas que reducen las emisiones generales y los costos de energía.

 

El proyecto de Hoosier Energy también podría determinar si hay beneficios adicionales no energéticos para la granja (como una mejor salud animal) cuando se utiliza tecnología de recuperación de calor residual en comparación con los métodos actuales de calefacción de establos.

 

Este estudio de proyecto proporcionará información imparcial relacionada con la eficiencia energética de la tecnología de recuperación de calor residual y el potencial de este conocimiento para hacer la transición de las granjas hacia nuevas tecnologías beneficiosas de electrificación.

 

Los resultados de la investigación actual del sistema de recuperación de calor residual son bastante prometedores, pero las pruebas adicionales en varios estados podrían resultar en una transición importante y tener un gran impacto en la industria avícola de EE. UU. Si bien reconocen el aumento de la carga eléctrica para los intercambiadores de calor, los fabricantes de equipos estiman un ahorro de gas de 40-50%. Ese tipo de ahorro en la industria avícola equivaldría a retirar aproximadamente 250.000 automóviles de las carreteras o plantar un millón de acres de bosque en los Estados Unidos.

 

Hoosier Energy se asociará con GDS Associates Inc. (GDS), una empresa de ingeniería y consultoría junto con el fabricante de equipos Heartland Farm Energy en este proyecto.

 

Además de la subvención de BEL y NRECA para completar este proyecto, Hoosier Energy también invertirá en la investigación para ayudar con el costo del equipo y los servicios de consultoría.

 

Aquellos interesados en obtener más información sobre este estudio deben comunicarse con Blake Kleaving, Gerente de Soluciones de Administración de Energía en Hoosier Energy en bkleaving@hepn.com o (812) 876-0389.

 

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